jueves, 24 de mayo de 2012

POPE-HOPE

La calidad en una democracia
no depende del número de votos
sino que detrás de cada uno 
se encuentren ciudadanos bien formados.

En su actual estado evolutivo
la humanidad es infantil e inmadura
pues elige a políticos y líderes
aunque sean sinvergüenzas redomados;
para mi, con todos sus defectos,
me gusta el sistema de la Iglesia:
una meritocracia con solera
(incluyendo las dagas florentinas).

Primero hay una criba desde abajo:
de simples sacerdotes hasta obispos
elevados después a cardenales;
después tales votan a elegir Papa
y ello en una ceremonia fastuosa
con guinda —permitiendo los partícipes—
a que inspire e intervenga el Santo Espíritu
y a escoger lo más guay Él se decida.

Pero el asunto asimismo depende
de pureza y santidad de intervinientes
con lo cual volvemos a las mismas:
muchas veces se eligen sinvergüenzas
o bien ciegos a que guíen a otros ciegos.

Desengañado del mundo y sus afanes
con mamarrachos salidos de las urnas
iniciaré mi carrera eclesiástica:
“fumata blanca”, casi casi la veo;
cotejaré por si acaso en Malaquías.

Lo primero en la Nave de San Pedro
tras calzar la mitra y vestimenta,
al salir al balcón en saludando
sería: “ahora hermanos dispersaos,
la Verdad es una tierra sin caminos”.




© albertotrocóniz / 12
Texto de: “TAL COMO LO VEO”
Imagen de: "FOTOTRATADA”
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1 comentario:

  1. Hoy es día de elecciones catalanas,
    con Raúl Castro predicando ante la ONU,
    y Francisco campando por sus fueros.

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