(1891 en Marsella)
de aquel hombre que hacía ya unos años
era ya muerto —muerto a la poesía me refiero—;
de aquel muchacho favorito de los dioses.
Doy aquí su reseña biográfica…
Doy aquí su reseña biográfica…
Fue el padre fugitivo de tu infancia
lejano de leyendas en oriente
al modo de erudito-aventurero
en ausencia-presencia dolorosa;
¿fue su vacío y búsqueda angustiada
en tu vida rebelde inconformista
el argumento de todo despropósito
en impulso a alcanzar el arquetipo?.
lejano de leyendas en oriente
al modo de erudito-aventurero
en ausencia-presencia dolorosa;
en tu vida rebelde inconformista
el argumento de todo despropósito
en impulso a alcanzar el arquetipo?.
Después de haber niñez transida de abandono
amaneció esperanza cargada en poesía
para el adolescente al que amaran los dioses;
ser su clochard celeste borracho de la vida.
Dar por saco a los ángeles: un programa o un sino;
amaneció esperanza cargada en poesía
para el adolescente al que amaran los dioses;
ser su clochard celeste borracho de la vida.
Dar por saco a los ángeles: un programa o un sino;
a los cerdos burgueses y a las vacas sagradas
andando cien mil leguas de Charlesville a Harar
con los zuecos alados en los pies por los surcos
surcos que abrevan sangre —París es la comuna—
rebeldía en los ojos transparentes y azules
el pelo alborotado y la pipa invertida
como en ceniza el alma a aquel fuego inmolada
por tabernas infectas borracheras de absinta
con camareras putas que te sirven dos huevos
cuando hay un par de francos, sino como los perros
a hozar escaparates de pasteles y libros
y a fatigar caminos que sacan de uno mismo
llevado por senderos no pisados por nadie,
caravanas de poemas o armas en contrabando
para lograr el oro a reventar sentinas
una madre castrante en la ciudad madrastra
y la patria errabunda por puertos y por dársenas
fumaderos de opio, tugurios-mala vida
la pelea cotidiana y el balazo en la mano
“yo te espero alma grande” temporada en infierno
para darse por culo en cuartucho de Londres
aquel barco borracho navegando sin norte
que tu vivías del Sol adoptado por padre
en comercio de esclavos adquiriste una negra
y aquel sirviente tuyo para inventar el sexo;
envenenas los perros y alimentas las hienas
subvertir toda imagen para romper cadenas
ya la pierna cortada como pipa partida
quebrada como tu alma desmembrada y sangrante
millonario en piojos encerrado en baúles
tú que nunca llevaste maleta a alguna parte.
Anular los sentidos: un programa o un sino;
difuminarlo todo para llegar al centro
al centro del infierno, centro del laberinto
Minotauro de sombra con los ojos azules.
Recuerdo bien tu frase que resume tu vida:
“Yo soy otro”
© albertotrocóniz / 12
Texto: de "POEMAS DEL HOMENAJE”
Imagen: de "FOTOFILTRADA"
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