martes, 13 de noviembre de 2012

CLOCHARD CELESTE: DOS POEMAS DE RIMBAUD


MI BOHEMIA

Y me fui con los puños en los bolsillos rotos;
también devenía mi abrigo cada vez más sutil:
vagaba bajo el cielo, ¡Musa soy tu vasallo!;
¡cuántos de tus amores espléndidos soñé!.

En mi único pantalón se abría un gran agujero.
—Soñador Pulgarcito, siembro en rimas senderos—.
Mi posada era en ellos la de la Osa Mayor.
 Las estrellas en cielos con un dulce fru-fru.

Lo escuchaba sentado al borde del camino
de septiembre en las tardes, cuando noté las gotas
de rocío en la frente cual un tónico vino;

mientras, hacía versos entre sombras fantásticas,
como si fuesen liras, pulsaba en los elásticos
de mis botas gastadas, ¡pie al pie del corazón!.




SENSACIÓN

En las tardes azules, me iré por los senderos,
lacerado del trigo, pisando yerbecillas:
sintiendo soñador, su frescor en los pies.
Dejaré el viento bañe mi cabeza desnuda.

Yo nada voy a hablar, ni voy a pensar nada;
que un infinito amor ascienda por mi alma,
y voy a irme muy lejos, lejos, como un gitano,
por la Naturaleza, feliz cual con mujer.





© albertotrocóniz / 12
Texto: versiones de “Ma Bohème” y “Sensation” (1870),
de Arthur Rimbaud,
de "POEMAS DE BABEL"
Imagen: de "FOTOFILTRADA"

EL POEMA MUSICADO


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