Dolor al pie de cruz, descendimiento;
envolver el cadáver en un lienzo
ungiéndolo con el aloe y la mirra
y trasladarlo al sepulcro prestado
depositándolo sobre un banco de piedra;
decir las oraciones y salirse
de la caverna helada, rodar losa
que con su mole impida todo acceso.
Tener que abandonarlo y alejarse
sintiendo desamparo, dolor, pérdida,
la esperanza frustrada y el fracaso:
sensación irreal, parezca un sueño.
Oscuridad, silencio hay dentro en tumba,
el cuerpo yerto yace sobre la piedra;
el perfume del bálsamo mortuorio
pervade con su aroma todo el antro.
Lejos Jerusalén muestra sus luces;
la noche es fría y el sitio tenebroso,
por fuera del sepulcro montan guardia
dos soldados puestos por el Pretorio;
¿serán estos los mismos que azotaron
al reo en la columna el otro día?;
la sangre que hasta ellos salpicase
obra un extraño efecto, algo magnético…
un inmenso sopor es el que invade
a entrambos centinelas, caen tomados
del sueño redentor de sus pecados
y en su lugar dos ángeles relevan.
Empieza a amanecer después del Sabath,
un primer rayo desgarra el horizonte
y se filtra hasta el fondo de la cueva
pues la gran losa allí ha sido apartada…
Enorme estruendo, un viento huracanado,
un resplandor de luz que es cegadora
e impronta en el tejido de la sábana
la imagen de la forma a la que alberga.
Vendajes y ataduras son caídas;
ambos ángeles recogen el sudario,
del lecho que fuera del cadáver
y uno a los pies y otro a la cabecera
esperan venga María Magdalena.
esperan venga María Magdalena.
El cuerpo luminoso de allí ha alzado
saliendo vencedor de las tinieblas
y a predicar sus enseñanzas últimas
a las Santas Mujeres y a Discípulos
emprende ya el camino a Galilea.
Resurrección —¡que hermosa es la palabra!—
“Noli Me Tangere” quien encarnado aún sea.
© albertotrocóniz / 12
Texto de: "POEMAS DEL SÍMBOLO"
Imagen de: "FOTOFILTRADA"
Otros enlaces del “Blog” relacionados
en el Tablero “POEMAS DEL RITO, DEL SÍMBOLO Y DEL MITO”
No hay comentarios:
Publicar un comentario