DÍA DE OTOÑO
Señor ya es hora, muy largo fue el verano.
Cubra tu sombra sobre el reloj de sol
y suéltale los vientos a los campos.
Ordena madurar en los frutos tardíos
dándoles aún un par de días del sur;
a culminar aprémialos e insulfa
el último dulzor en la uva grávida.
Quien aún no tenga casa, ya no la construirá.
Quien ahora sólo esté, lo estará por más tiempo;
velará, leerá y escribirá sus cartas
y de aquí para allá paseará alamedas
con vagar intranquilo mientras se caen las hojas.
© versión de albertotrocóniz / 11
de "EL LIBRO DE BABEL …"
Otros enlaces “Post”-relacionados
en el Tablero “EL LIBRO DE BABEL”
No hay comentarios:
Publicar un comentario