Con su mueca en la sonrisa más me agrede
congelada está en los labios que son pico:
perpetúa tal submundo en los objetos
que no libran más con ello de lo inicuo.
Los muñecos van haciendo sus cabriolas
y en su mirar hay la luz de los muertos,
el sol lejos entre nubes amenaza
porque temen en disfraz el ser heridos.
Da más vueltas sobre el eje el tiovivo
concitando allí a los niños a lo efímero:
sube y baja, gira y gira por lo eterno
en un tiempo que es trivial en lo infinito.
Tonadillas pegadizas y vulgares,
colorines estruendosos y chillones,
esculturas adefésicas de plástico,
dan comida-basura en puestecillos.
La alegría para masas se calcula:
riesgo inane donde todo está medido;
disecadas mariposas son papeles
de colores maquillados fementidos.
Lo banal y lo falso de las piedras
que no pesan, de maderas que no arden
—normativas hay de incendios que lo impiden—
sofocados corazones aburridos.
Cabalgatas que con un horario fijo
más repiten tercamente obligaciones
de alegrarse y ser feliz con tonterías:
empalagan los dulzores ofrecidos.
Narraciones baladíes la historia
de lo humano que parióse en sufrimiento;
sólo cáscaras sin meollo que indigeste,
sin pasiones temerarias excesivas.
Todo un Auschwitz camuflado en colorines,
musiquillas que se imponen a los presos
como a veces se les hace a las gallinas
a poner cada vez más y más huevos.
Vigilantes disfrazados de muñecos
se me antojan que confinan en recinto
donde atrapan y forzado a entretenerse
ser sangrado en loor a falsos ídolos.
Hubo uno que obligado a ser un Goofy
varios años por mañanas, tardes, noches,
puso fin a su vida, gran escándalo
pues se ahorcó sin quitarse el uniforme.
Como ovejas en las colas apretados
al Moloch de siniestra mente enferma
que supura sanguijuelas hechas néon
va el rebaño que se lleva al sacrificio.
va el rebaño que se lleva al sacrificio.
En la caja el machacante tintineo
incansable va sumando cifras verdes
transferidas a una mina de gusanos
donde hiede el olor de lo podrido.
No hay perdón al pecado contra espíritu:
que se tome verdadero por lo falso;
la Sodoma y la Gomorra en lo liviano
sea un día castigada por el fuego
cuando advenga el Paráclito encendido.
© albertotrocóniz / 10
Texto: de "TAL COMO LO VEO"
Imagen: "Parque de Atracciones"
de "FOTOPINTURA"
de "FOTOPINTURA"
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