LÍMITES DE LO OSCURO Y DE LA LLAMA

A ti llama que luces en fulgores

casi agotados en pábilo de vela,

te das cuenta que pronto no habrá nada;

dices: “voy a morir, sólo habrá noche”.

Tú imaginas la noche mas no puedes

alcanzar lo que es en ese punto

en que converge tu extinción y lo otro

que desconoces y tan sólo imaginas.

Lo que dices es cierto: que te extingues;

mas no es verdad, tú otra realidad eres

diferente a tiniebla a la que avanzas

haciendo de ello tan sólo pensamientos.

Y tú oscuridad omniabarcante,

vacío que al cabo todo lo contienes:

a la llama, al hombre, a los poderes;

todo vuelve hacia ti, sí a tu silencio.

Las formas limitantes se disuelven

en lo infinito de la noche, astros

que agotado su plazo hacia el gran seno

de donde un día surgieron se retornan.

En esa llama que se extingue, nunca,

ni un solo instante hay que no haya luces,

y en el punto fatal en que se apaga

nace otra realidad que es diferente.

Noche, en tu elocuencia dices

una canción sutil de amor y muerte.

© albertotrocóniz / 13

Texto: de “POEMAS DE LA SOMBRA”

Imagen: “Pábilo” de “FOTOPINTURA"

Referencia:

“Meditación, el Arte del Éxtasis”, Osho.

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