Ya la fuerza genésica se siente
bullendo por la entraña desde dídimos,
e inunda el mástil con savia efervescente
aprestándolo a nueva singladura;
y llega hasta el estómago y el vientre
en donde se almacena en remolino
y hace espirales que trepan por la espina
nutriendo el corazón y la garganta,
tonificando amígdalas y lengua
—trasunto de los órganos abajo—
sube a la frente, después a coronilla,
y desde allí anhela las estrellas.
Todo ya soy como un conducto presto
para encauzar del pozo el barro oscuro
y trasmutarlo a realizar la alquimia
de generar más vidas para el cosmos;
de ser utilizado de instrumento
con la vara de luz que me ha otorgado
el arcano designio que desea
obrar la magia que multiplique engaño.
Comparte pues conmigo tus poderes,
los de tierra feraz si fecundada
y como un atanor toma mi fuego;
y como un atanor toma mi fuego;
mas no dudes ya más pues eres parte
del torbellino que trae la primavera.
© albertotrocóniz / 20
Texto: de “POEMAS DEL GOZO”
Imagen: “Lingam”
de “DIBUJO Y PINTURA”.
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