En la espiral de un tiempo recurrente
en forma de escalera laberíntica,
me paro en dos contigüos descansillos:
si anteayer fue de Borges el deceso,
me paro en dos contigüos descansillos:
si anteayer fue de Borges el deceso,
hoy resulta de nuevo el natalicio
de ese genio inquietante del dibujo
que dieron Países Bajos: M.C. Escher.
Ambas obras nos revelan patente
fascinación que se encierra en los límites
que el arte lleva hacia lo ilimitado
y un objeto vulgar puede embarcarnos
Ambas obras nos revelan patente
fascinación que se encierra en los límites
que el arte lleva hacia lo ilimitado
y un objeto vulgar puede embarcarnos
en viaje que transporta…
(Representado arriba sólo en muestra; para acceder pulsar sobre el enlace)
2018 06 17 Ed.1ª
ResponderEliminar